El Romanticismo alemán
El romanticismo alemán fue el punto más álgido que adoptó el romanticismo a nivel mundial. Desde la Escuela de Idiomas de la Cámara de Comercio de Bilbao creemos que entender este género es importante para aprender alemán porque es parte de la cultura alemana. Por ello, en este post profundizaremos en el romanticismo alemán y sobre todo, en el romanticismo alemán en la pintura.
Al igual que en el movimiento del romanticismo en general, el romanticismo alemán destaca por primar en sentimiento y las emociones sobre la racionalidad y la técnica. El espíritu y el sentido de la vida eran las ideas más trabajadas en las obras del romanticismo alemán. Además de ello, la presencia de la naturaleza, la soledad y el heroísmo fueron otros temas que se trabajaron en las pinturas.
Algunas de las obras de diferentes campos del romanticismo alemán aún tienen gran importancia en la actualidad. Entre ellos podemos encontrar la obra de ballet “El cascanueces”, el cuento popular de “los músicos de Bremen”…
El romanticismo alemán en pintura
La pintura romántica se desarrolló conjuntamente con la arquitectura, la filosofía y la literatura donde el dramatismo y la expresión fueron los elementos descriptivos más importantes, influenciados en gran parte por los efectos de la Revolución Francesa del año 1789.
La pintura romántica sustituyó a la pintura neoclásica. Estos dos estilos eran antagonistas uno del otro; mientras que el estilo neoclásico perseguía el orden, la geometría, la racionalidad y la tranquilidad, el estilo romántico se aleja de estos ideales y se centra en la fantasía, el drama, lo imaginario… Por ello, fue un estilo que rompía con lo establecido hasta el momento.
El romanticismo alemán tuvo tres temas principales en sus obras: El misticismo, la expresión de los sueños y el sentimentalismo. Aquí, se podía apreciar un especial culto hacia la Edad Media, las brumas y paisajes del norte y el exotismo.
Por otra parte, la ideología política fue un factor fundamental para el desarrollo del romanticismo. La pintura se convirtió (al igual que muchas otras veces) una forma de expresión donde se plasmaban los ideales de cada pintor y la tensión que se vivía en esa época. Un claro ejemplo y al mismo tiempo, una de las obras políticas más importantes de la historia, es el cuadro “La libertad guiando al pueblo” de Delacroix (1830).
Entre los artistas más destacados del romanticismo alemán podemos encontrar a Friedrich, Gros, Delacroix, Goya, Schinkel… Cada uno de ellos expresó diferentes facetas en sus obras que se convirtieron en los principales defensores de este estilo de la pintura.
Esperamos que este post resumido sobre el romanticismo alemán te haya gustado. Aprender sobre la cultura e historia de un país sirve como refuerzo complementario a las clases de aprender idiomas, en este caso, aprender alemán. Si quieres seguir leyendo este tipo este posts sobre temas relacionados con aprender sobre cultura, viajes… siguenos en redes sociales para no perderte ni un detalle.